Y en esta ocasión
empezamos con una buenísima noticia. Como la de que una niña, Ainsley,
concretamente, ha llegado a convertirse en la “pequeña Miss Sunshine” de
Carolina del Norte. ¿Cómo lo ha conseguido? Gracias a un concurso de disfraces
de princesa. Lo impactante de la noticia es que su disfraza era de perrito
caliente, no de una princesa al uso. Se negó a ponerse falda y tutú y creyó que
su disfraz era más divertido. Ellen DeGeneres ha querido homenajear a esta
pequeña y reconocer su acto.
Y de una buena
noticia a una mala, ya sabéis, esto funciona así. Bueno, en realidad es mala
porque al fin y al cabo no deja de ser vandalismo, pero en realidad nos hace
gracia. Y es que el ayuntamiento de Torrelodones decidió instalar una gran caca
hinchable de tres metros de altura. La intención era concienciar a los dueños
que deben recoger aquellos restos que dejan las mascotas. Bajo el hashtag
#nomascacas se creó una campaña en contra de incómoda acción. Solo la caca
hinchable tuvo un coste de 3.800 euros y ha durado apenas unos días. Las
cámaras de seguridad acechan para encontrar al culpable.
Y siguiendo con los
temas escatológicos, nos vamos al mundo pelos, en nuestro Revuelto Curioso. Aquí os contábamos que son los rubios (naturales,
obviamente), los que tienen más pelos en la cabeza, con unos 150 000 cabellos.
Les siguen los morenos, con unos 130 000 cabellos y por último están los
pelirrojos, quienes tienen entre 80 000 y 90 000 cabellos. Aunque también
queríamos aclarar el falso mito sobre si a los muertos les crece el cabello. No
es así, si pudiera parecerlo sería por la contracción de su piel y su masa
muscular que puede hacer parecer más largo este pelo.
Unos 20 centímetros
es la longitud que se puede llegar a alargar un cabello a lo largo del año,
siendo especialmente las noches y los veranos cuando más se acentúa este
crecimiento. Y es Xie Qiuping la mujer que tiene el pelo más largo del mundo.
Esta mujer china ostenta este Premio Guinness desde el año 2004, cuando se
midió su cabellera con una longitud de 5,62 metros. Y luego está la
hipertricosis o el síndrome del hombre lobo. Las personas que lo sufren ven
cubierto prácticamente todo su cuerpo de vello, excepto en las palmas de las
manos y los pies. Únicamente se han documentado en torno a 40 o 50 casos desde
su descubrimiento.
Y de los pelos más
curiosos a uno de los bigotes más famosos de la historia del Cine, el de Cantinflas. Su auténtico
nombre era Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes. Actor mejicano de gran
trascendencia internacional que fue absorbido por su propio personaje. Al igual
que Charlot, Cantinflas solo era uno de sus personajes, pero caló hondo y pasó
a ser conocido por ese nombre. Se asociaba a las clases bajes y mucha gente se
veía reflejado en él, por lo que pronto alcanzó la fama que hoy tiene. Se dice
que la idea de salir a hacer comedia, disfrazado de «peladito» (un sinvergüenza
mal hablado en Méjico) la tomó del comediante Manuel Medel.
Este
personaje le valió su participación en una película de Hollywood, La vuelta al
mundo en 80 días. Además de modificar
el léxico de su país quien adoptó palabras como “ser un Cantinflas”,
“cantinflear”, “cantinflada”, “cantinflesco” o “cantinflero”. A pesar de que
algunas de sus películas fueron dobladas al inglés y al francés, y que su
trabajo fue bien recibido entre el público de Francia, los juegos de palabras
tan particulares en castellano resultaban difíciles de traducir. Su gran éxito,
entonces, lo logró entre el público hispanohablante, en Hispanoamérica, Guinea
Ecuatorial y España, donde todavía tiene muchos admiradores.
Fue ayudante de zapatero, para después "ascender" a limpiabotas,
cartero, taxista, empleado de billar, boxeador y hasta torero. A principios de
1928 se alistó en el ejército mexicano como soldado de infantería con estudios
de mecanógrafo, pero el 23 de mayo de ese año su padre envió una carta al
ejército en la que solicitaba la baja de su hijo. El motivo no era otro que la
edad de Mario: tenía 16 años y había mentido, fingiendo que tenía 21.
Tras retirarse, Mario Moreno dedicó su vida a ayudar a los demás a través
de la caridad y de organizaciones de beneficencia, sobre todo las de ayuda a la
infancia. Murió a causa de una metástasis de cáncer de pulmón el 20 de abril de
1993. Miles de personas se reunieron en un día lluvioso para su funeral, un
evento nacional que duró tres días. Después de su muerte,
comenzó una batalla legal entre su hijo adoptado, Mario Moreno
Ivanova, y el sobrino del actor, Eduardo Moreno, sobre el control de 34
películas hechas por Cantinflas. El sobrino sostenía que su tío le había dado
permiso escrito para tomar los derechos de las películas cuando estaba en su
lecho de muerte. Moreno Ivanova argumenta ser el heredero directo de Cantinflas
y por lo tanto los derechos le pertenecen. Eduardo Moreno ganó la demanda en
dos ocasiones, pero finalmente triunfó Moreno Ivanova, después de dos
apelaciones. Así de triste fue el legado que quisieron recoger los herederos.
Según un obituario, es un nombre sin significado alguno, que fue inventado
a fin de evitar que sus padres se enteraran de que trabajaba en el negocio del
espectáculo, que consideraban una ocupación vergonzosa. Esta es la explicación
que dio el propio Mario Moreno en su última entrevista televisiva en 1992. Pero
según el sobrino del actor el nombre fue una creación propia del actor y que su
verdadero origen se lo llevó con él a la tumba.
Un personaje que siempre quedará en nuestro recuerdo, con sus películas y
frases célebres. Aunque no todos lo hacen por sus buenas o entrañables vidas.
Los hay, como es este caso, que lo hacen por ser el asesino más famoso de la Historia, aunque sin identidad
conocida. Hasta ahora. Y es que Jack el Destripador fue un asesino en serie de
identidad desconocida que cometió varios crímenes en 1888. El citado apodo se
originó de una carta escrita por alguien que se adjudicaba los asesinatos bajo
este alias, y como resultado de su difusión por los medios de comunicación,
dicho nombre pasó a ser conocido por la sociedad en general.
Muchos fueron los sospechosos, pero sólo uno era el culpable, ¿quién? Era
lo que se preguntaba la policía de la ciudad. Gracias a una prueba de ADN se
descubrió que Jack resultó ser Aarón el Destripador, un peluquero polaco, cuyo
apellido en realidad era Kosminski, Aarón Kosminski. Todo esto lo sabemos
porque el escritor Russell Edwards compró en 2007 un chaleco que pertenecía a
Catherine Eddowes, la segunda mujer asesinada, que envió a un especialista en
genética. En él se encontró el ADN de dos personas distintas. Solo debía
comparar el material genético del asesino con el de los sospechosos.
El científico localizó a algunos de los descendientes de los sospechosos
para poder realizar la comparación pertinente del ADN encontrado. Y encontró a
una pariente británica de la hermana de Kosminski que comparte el ADN
mitocondrial con el presunto asesino. Los dos ADN coincidían en más de un 99%,
un porcentaje que ascendió al 100% tras el segundo análisis. De hecho, fue
capaz incluso de “identificar la etnia y procedencia geográfica del ADN
extraído, perteneciente al halogrupo T1a1, común en las personas de origen ruso
y ascendencia judía”. Voilà, la
ciencia todo lo puede, hasta cuando parece todo perdido.
Y desde nuestra sección de Música,
queríamos acercaros más a la vida de este ídolo de masas, Justin Drew Bieber,
nacido en Ontario, Canadá. Hijo de Pattie Mallette, quien lo crio sola, y aupó
su actual carrera como cantante. Después de ganar algunos premios locales, su
madre tuvo la idea de grabar sus interpretaciones y colgarlas en YouTube. En
los vídeos aparecía cantando canciones de Chris Brown, Stevie Wonder, Justin
Timberlake o Usher, ya que en aquel entonces no disponía de repertorio propio.
Tiene un club de fans que ni el mejor ejército, le apoyan, defienden y
adulan hasta la saciedad. Puede decirse que Justin Bieber es otro caso
emblemático de las nuevas generaciones de artistas que surgen con y gracias a
Internet. Justin grabó su primer disco en Atlanta y poco después despertó el
interés del mismísimo Usher. Siendo él fan, no pudo recibir mayor honor. Desde
ahí no ha parado de cosechar éxitos y fans.
La atracción que
ejerce es tal que en más de una ocasión han tenido que suspenderse sus
conciertos: la cantidad de seguidores que congregan supera en tal medida las
previsiones que los organizadores no pueden garantizar la seguridad del
acontecimiento. Bieber, sin embargo, no se considera a sí mismo como una
estrella para consumo de adolescentes. En una ocasión declaró:
"Creo que la gente adulta puede apreciar mi música porque muestro sinceramente mi corazón cuando canto, y eso no es cursilería. Pienso que puedo seguir creciendo como artista, y mis seguidores crecerán conmigo."
Ahí queda eso… Y os
dejamos uno de sus primero éxitos que le supuso el reconocimiento mundial.
¡¡NO DEJÉIS DE SER CURIOSOS!!
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